Dificultades de la soldadura en aluminio
El aluminio tiene una capa de óxido que lo protege de la corrosión. Sin embargo, esta capa es una de las causas que dificulta el proceso de soldadura. La capa de óxido es un aislante eléctrico y térmico, y no puede soldarse directamente. Así que lo primero sería eliminar dicha capa. Esto se puede efectuar con un cepillo de alambre, un decapante o un limpiador de aluminio.
Otra de las causas que dificulta la soldadura del aluminio es su alta conductividad térmica, pues demanda de un mayor aporte de calor al aplicársele soldadura. Se requiere un mayor aporte de calor para soldar piezas de aluminio. Pero, a la vez, el aluminio se dilata el doble que el acero al calentarse. Esto puede provocar una deformación mayor y más difícil de controlar de la pieza que se está soldando, así como mayores tensiones de contracción en los puntos de soldadura.
A pesar de estos desafíos, la soldadura de piezas de aluminio puede ser un proceso efectivo para unir piezas de metal, especialmente con los sistemas láser y tig.
Ventajas de los sistemas láser y tig para soldar en aluminio
- Mayor precisión: Tanto el rayo láser, en el caso de la soldadura láser, como el arco eléctrico en el caso de la soldadura tig, son pequeños. Lógicamente el rayo láser es mucho más estrecho y se puede enfocar con mucha precisión en el área a soldar, incluso en áreas inferiores a un milímetro de diámetro. Pero los pequeños arcos eléctricos de la soldadura tig también permiten una gran precisión para aportaciones un poco mayores. En ambos casos las piezas soldadas son más precisas y uniformes que con otros métodos.
- Mayor calidad: Ambos sistemas evitan el desperdicio y los errores del material de soldadura. Garantizan una calidad constante y reducen el riesgo de daños accidentales en la pieza.
- Mayor velocidad: Los dos son sistemas más rápidos que otros métodos de soldadura, lo que permite una mayor producción en menos tiempo.
- Menor distorsión: Ambos sistemas evitan las distorsiones en las piezas. Especialmente destacable es el sistema láser. Dicho sistema al tener una zona de impacto menor no solo reduce la posibilidad de deformación de la pieza, sino que también evita rechupados y poros.
- Menor necesidad de acabado: Se consigue una soldadura más limpia y uniforme que otros métodos de soldadura, lo que significa que hay menos necesidad de acabado después de la misma.